Mañana arranca la primera de las semifinales de la Euro 2008. Turquía ha sido una de las sensaciones de la Euro, sacando partidos importantísimos viniendo de atrás y siempre, siempre, siempre, sobre la hora y basados en una gran fortaleza mental y un gran corazón.
Alemania, quien para muchos aficionados, no es un equipo tan fuerte como algunos que han quedado fuera, ha demostrado ser superior a sus rivales (exceptuando a Croacia), pero la manera con la que se ha impuesto con autoridad y sin mayores sobresaltos tanto a Polonia, Austria y Portugal, ha hecho parecer que lo sucedido frente a los croatas ha sido solo una mala tarde.
El partido de mañana enfrenta a los dos equipos con la mentalidad más fuerte de la Euro, aunque, definitivamente, los alemanes cuentan con un fútbol más preciso, de más orden y mayor talento tanto en lo colectivo como en lo individual. Para desgracia de los turcos, el equipo otomano cuenta únicamente con 12 jugadores de campo para afrontar el encuentro, por lo que probablemente, deban hacer uso de alguno de los dos porteros en posición de campo, y no solo eso, sino tener que reubicar a jugadores en algún puesto no acostumbrado.
La gran estrella turca, Nihat, se encuentra ahora lesionado en Estambul, perdiéndose el resto de la competición. Por su parte, la gran estrella alemana tiene el nombre de Bastian Schweinsteiger, lo que preocupa a los turcos, ya que además de el se encuentran otros dos jugadores que podrían atemorizar por si solos a cualquier equipo: Michael Ballack y Lukas Podolski (eso sin contar a Miroslav Klose y para mi el mejor lateral izquierdo del mundo: Phillip Lahm).
Los turcos están acostumbrados a los milagros, aunque saben que esto será más difícil, y no por contar con pocos jugadores, sino por que saben que Alemania es Alemania, y que el peso de la historia futbolística alemana es mucho mayor al peso croata, checo o suizo.
El milagrono se dará en Basilea. Los turcos han hecho bastante, han alegrado demasiado el torneo, pero desgraciadamente para los amantes del fútbol cardiaco y de las emociones fuertes, regresarán mañana a Estambul.
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