viernes, 19 de noviembre de 2010

La diferencia entre lo objetivo y lo subjetivo

“Cruz Azul no hizo nada, hizo los 2 goles y después no hizo nada”
-Martín Bravo

“Me dió un golpe en el cuarto round que lo sentí, después de eso ya fue otra pelea.”

-Antonio Margarito, al opinar sobre su pelea con Manny Pacquiao

“Si le hubieramos ganado a Uruguay, hasta dónde hubieramos llegado.”

-Muchos mexicanos al terminar el mundial.

¿Cómo deshacerte de filias y fobias al tratar de entender al futbol o cualquier otra cosa? Supongo (y lo sé, debo presuntuosamente agregar) que esa pregunta se la habrán planteado filósofos y pensadores desde tiempos anteriores a ustedes y a mi. Pero definitivamente es la primera tarea que debe emprender cualquier persona en búsqueda de la verdad.

Pero vamos, tampoco hay necesidad de ser tan exagerado pues no estamos buscando alguna verdad ¿o si? Tan solo estamos tratando de buscar más pretextos para disfrutar de lo que ustedes y yo consideramos El Deporte Más Hermoso del Mundo (si usted no considera al futbol como el deporte más hermoso del mundo: a) ¿Qué chingados le pasa? b) mejor ni siga leyendo.) Uno de esos pretextos, si no el mejor, es entender al futbol, y entender, desde mi entender, significa: tener ideas lo más claras posibles y empatadas con la realidad de la cosa que busca entenderse. ¿Entendieron?

Ahora que ya entendemos que lo que busco es entender al futbol, estamos en condiciones de aclarar lo siguiente: en el futbol como en la vida, lo que yo quiero no siempre es lo mismo a lo que sucede; y muchas veces, puede ser muy diferente a lo que yo creo. En menos palabras: lo que creo, lo que quiero y lo que es, son tres cosas distintas. Si queremos entender al futbol (o cualquier otra cosa) debemos hacer que se parezca lo más que se pueda, el lo que creo al lo que es.

Es importante clarificar esta santísima trinidad (lo que creo, lo que quiero y lo que es) para que pueda entenderse la GRAN diferencia que hay en nuestro blog cuando hablamos de futbol, a cuando hablamos de lo queremos que pase en el futbol. Ahora sí, voy a los ejemplos:

1. Cuando se apoya a un equipo con esos famosísimos clichés de “vamos sutanitos”, “fulanitos son los mejores” , “aguante manganitos”. Estamos hablando de lo que queremos. Por eso podemos decir cualquier cosa que nos plazca y poner fotos en internet, fomentar la rivalidad con carrilla con los amigos, colgar banderas en nuestras casas, pintar nuestros rostros de cualquier color, etc. Etc. Y un chingo de etcéteras.

2. Cuando hablamos de futbol, pretendiendo escrudiñar lo sucedido en algún de partido de futbol. Estamos hablando de lo que creemos, por lo tanto debemos ser conscientes de que está permitido, y es muchas veces necesario para lograr empatar lo que creemos con lo que es, separar lo que creemos de lo que queremos. Por lo tanto es perfectamente natural irle al Atlas, obviamente sus aficionados quieren que gane algún día, y también obviamente, todo mundo sabe que no van a ganar algo.

3. Cuando un árbitro sopla su silbato y marca una falta, el arbitro ha decretado ( o no decretado ) lo que es. Por lo que por más que lloremos, pataleemos, o gritemos un futbolera interjección tipo: ¡Ejele!, ¡Eyta! Etc. Etc. Y un chingo de etcéteras. Nunca, pero nunca, podremos cambiar lo que ya es.

No hay comentarios: